domingo, 18 de enero de 2009

Autorretrato porcino con Quijote.


Pedro se empeña en que lea el Quijote. Y yo, que últimamente no tengo el coco para ahondar en profundidades literiales, me niego en redondo, (bueno, no tan en redondo, siempre hay que dejar un resquicio abierto a cualquier posibilidad).

Pedro insiste, y no sólo para que lea, tambien quiere que me una a su grupo de lectura y de mi opinión. A ver que hago yo entre gente tan sesuda, aparte del ridículo, me digo. Asi que me niego en ovalado.

En estas estoy, cuando en una de las varias cenas pre-navideñas a las que he asistido, un personajillo con enfermedad mental (no se puede explicar si no, el interes que tiene en mis libritos en miniatura), me hace una propuesta y retraso todos los compromisos miniaturiles pendientes para ponerme manos a la obra...

Y aqui estamos: Me temo que la semana que viene se publicará el primer autorretrato quijotesco de una no-lectora del Quijote en un blog sobre la lectura del Quijote en el que una servidora no suele comentar. Ahí me las den todas, metida entre un monton de gente leida, que es capaz de entender y cogerle gusto al Quijote (no puedo con, él, lo reconozco: Llamadme borrega, ignorante o lo que querais, pero a mi la obra cumbre esta, me aburre soberanamente).

Qué cosas oye, esto sólo pasa en internet...

1 Han entrado en la cochiquera:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Te veo comenzando la lectura este mismo año...
Gracias por el autorretrato. Es genial.